Resumen
En América del Norte, muchos sitios históricos de encuentros coloniales cuentan con monumentos que honran las historias de los colonos europeos, mientras ocultan las historias indígenas. Por ejemplo, en 1912, la comunidad franco-americana en Plattsburgh, Nueva York, erigió un dramático monumento a Samuel de Champlain y lo posicionó en la orilla occidental del Lago Champlain. La inscripción lo identifica como “navegante, descubridor, colonizador”, y la ,escultura incluye a un explorador nativo americano agachado a sus pies. Aunque pretendía registrar el éxito de las alianzas interculturales en la Nueva Francia, este monumento evoca recuerdos de los impactos violentos y continuos de la colonización europea. Intentos recientes por mejorar el monumento añadiendo una nueva placa interpretativa empeoraron la situación al introducir imágenes confusas que oscurecen aún más las historias indígenas. Desde una perspectiva indígena, los monumentos a los encuentros coloniales rara vez son celebratorios; a menudo son dolorosos recordatorios de una diplomacia fallida y de una colonización descontrolada.
El territorio que hoy llamamos “Norteamérica” está lleno de monumentos al pasado colonial que, en muchos casos, permanecen sin cuestionarse, a pesar de los errores y estereotipos históricos que suelen representar. Al examinar estas instalaciones conmemorativas al pasado, es imprescindible comprender exactamente por qué estos monumentos existen. ¿Cuál era el contexto histórico (quién es esta persona, cuándo vivió y por qué es importante)? ¿Cuál era el contexto social popular (cuándo se creó el monumento, quién lo diseñó, por qué es tan querido)? ¿Cuál era el contexto étnico y político (qué comunidades estaban siendo representadas intencionalmente por este monumento; quién fue mal representado o marginado a consecuencia de ello)? Quizás el punto más importante a destacar es que las imágenes y palabras en el ámbito público importan. El público se ha educado para creer—basado en la tradición euroamericana de erigir estatuas de personas “importantes”—que estos monumentos comunican algún tipo de “verdad” elemental. Por supuesto, hay mucho más que decir sobre el tema.
Como ejemplo, hay un impresionante monumento al “navegante, explorador y colonizador” francés, Samuel de Champlain (1567-1635), se alza orgulloso en la orilla occidental del lago, en la actual Plattsburgh, Nueva York, aunque Champlain nunca pisó esa orilla (Figura 1). El monumento —que se encuentra en territorio Kanienkehaka (Mohawk), con vistas al lugar que los Abenaki llaman Bitawbakw (Lago Champlain)— fue erigido por miembros de la comunidad franco-americana de Plattsburgh y dedicado en 1912. Monumentos y marcadores relacionados con Champlain se instalaron en varios lugares, en Vermont del lado del lago, en Swanton, Vergennes e Isle La Motte. Champlain fue especialmente popular durante el año del tricentenario de 1909, cuando el Fuerte Ticonderoga y otros lugares albergaron representaciones y recreaciones celebrando la infame “Batalla del lago Champlain” en 1609.1
Champlain es un ejemplo insólito de un colonizador europeo que verdaderamente fue invitado a estas tierras por los pueblos indígenas. En 1609, un grupo de líderes maliseet, montagnais, algonquin y abenaki le pidieron que sirviera de aliado en su conflicto con los Haudenosaunee (entonces conocidos por los colonizadores como los Iroquois de las Cinco Naciones). El relato en primera persona de Champlain sobre la “Batalla del Lago Champlain” del 30 de julio de 1609 describe el carácter ritual de la guerra indígena, pero también señala la conmoción causada por el primer uso de armas de fuego europeas en esta región.
“Cuando llegó la noche nos embarcamos en nuestras canoas para continuar nuestro camino; y como íbamos muy tranquilos . . . nos encontramos con los iroqueses a las diez de la noche en el extremo de un cabo que se proyecta en el lago por el lado oeste [cerca del actual Fuerte Ticonderoga]. Ambos grupos empezamos a dar fuertes gritos, cada uno preparando sus armas . . . Cuando estuvieron armados y en formación, enviaron dos canoas apartadas de las demás para averiguar de sus enemigos si querían pelear. Respondieron que no deseaban otra cosa; pero que, en ese momento, no había mucha luz y que debían esperar a que amaneciera para reconocerse, y que en cuanto saliera el sol abrirían la batalla . . . [T]oda la noche la pasaron bailando y cantando, tanto de un lado como del otro, con insultos interminables y otras habladurías . . . Después de cantar, bailar y parlamentar, se hizo de día. Mis compañeros y yo permanecimos ocultos, por miedo a que el enemigo nos viera, preparando nuestras armas . . . Tras armarnos con armaduras ligeras, cada uno de nosotros tomó un arcabuz [un mosquete corto] y desembarcó. Vi al enemigo salir de su barricada, cerca de 200 hombres, fuertes y robustos a la vista, avanzando lentamente hacia nosotros con una dignidad y seguridad que me agradaron mucho. A la cabeza del grupo había tres jefes”. 2
Los Haudenosaunee se estaban preparando, con esta noche de cantos y danzas seguida de una avanzada ritual y una demostración de poder, para participar en una guerra indígena tradicional, de una manera que, a pesar de mucho ruido y furia, probablemente causaría daños mínimos en ambos bandos. Sin embargo, la compañía liderada por los Montagnais tenía otros planes. Avanzaron lentamente, ocultando cuidadosamente a sus aliados franceses hasta el último momento posible. Champlain preparó su arma. [Figura 2.]

”Lucha de Champlain con los Iroqueses”, ilustración de Samuel de Champlain c. 1613, en Francis Parkman, Historic Handbook of the Northern Tour: Lakes George and Champlain; Niagara; Montreal; Quebec (Boston, MA: Little, Brown & Company, 1912), 9.
“En seguida me vieron y se detuvieron, mirándome, y yo a ellos. Cuando vi que hacían ademán de dispararnos, apoyé mi arcabuz en la mejilla y apunté directamente a uno de los tres jefes. Con el mismo disparo cayeron dos de ellos al suelo, y uno de sus compañeros que fue herido y después murió . . . Los iroqueses se quedaron muy asombrados de que dos hombres hubieran sido matados tan rápidamente, a pesar de ir provistos de una armadura [antiflechas] . . . Mientras cargaba [el arcabuz] de nuevo, uno de mis compañeros disparó un tiro desde el bosque, lo que los volvió a sorprender hasta tal punto que, al ver a sus jefes muertos, perdieron el valor, se dieron a la fuga y abandonaron el campo y su fuerte, huyendo a las profundidades del bosque. Persiguiéndolos hasta allí maté a algunos más . . . Después de haber obtenido la victoria, ellos [los aliados indígenas de Champlain] se entretuvieron tomando una gran cantidad de maíz y harina de sus enemigos, y también sus armas, que habían dejado para correr mejor. 3
Tras este encuentro, breve pero devastador, los aliados de Champlain “celebraron, bailaron y cantaron”, y tomaron prisioneros. En su diario, Champlain notó que luego se tomó la libertad de nombrar el lago “donde se realizó esta acción” en su honor: “Lago Champlain.”
Los efectos de este encuentro fueron duraderos, dado el uso generalizado posterior de armas de fuego en las guerras inter-nacionales e inter-tribales. La arrogancia de nombrar el lago en su honor es evidente, pero Champlain no estaba (como tantos colonizadores) motivado únicamente por la creencia de que los colonizadores europeos tenían derechos inherentes para reclamar tierras no cristianas bajo la “doctrina del descubrimiento.” Su objetivo, en línea con el doloroso legado del colonialismo de poblamiento en todas partes, era colonizar tierras indígenas con colonos de Europa para crear la colonia de “Nueva Francia.” Así, aunque pretendía conmemorar el éxito de las alianzas interculturales en la Nueva Francia, este monumento también evoca recuerdos del violento impacto de la colonización europea. Los pueblos indígenas sufrieron generaciones de guerras interculturales, pérdida de tierras y opresión religiosa de las que sus comunidades aún se están recuperando hoy en día. Desde una perspectiva indígena, estos monumentos a los encuentros coloniales no son celebratorios; son dolorosos recordatorios de una diplomacia fallida.
El monumento a Champlain aún mira hacia el lago en la actualidad, con su representación estereotipada y culturalmente inexacta de un guerrero indígena algonkiano oriental con un tocado de plumas al estilo de las Grandes Llanuras (sin ninguna semejanza con el atuendo indígena en los años 1600), agachado al pie del pedestal. [Figura 3.]

Figura 3. Monumento a Samuel de Champlain, Plattsburgh, Nueva York. Fotografía de Margaret M. Bruchac.
En 2020, en un esfuerzo por reconciliarse de alguna manera con esta historia problemática y esta iconografía torpe, la ciudad de Plattsburgh decidió instalar una nueva placa interpretativa.4 Esta placa representaba un intento de llenar los vacíos destacando la historia indígena, sin embargo generó una confusión considerable.5 Aunque pretendía abordar errores históricos, el diseño mezcla imágenes y textos precisos e imprecisos de manera curiosa.6 Presenta un mapa muy grande (y muy anticuado) que incluye ilustraciones de indígenas casi desnudos representados en un estilo romántico típicamente eurocéntrico. La ilustración histórica de la infame Batalla del lago Champlain está, sorprendentemente, ausente.
La placa incluye dos ilustraciones modernas de John Fadden, un notable artista haudenosaunee. Una de ellas muestra una canoa maliseet y otra un jefe onondaga dirigiéndose a John Hancock en Filadelfia en 1776. Ambas son culturalmente precisas e interesantes, pero las relaciones de Hancock con los Haudenosaunee en la década de 1770 no tienen que ver con las relaciones de Champlain con sus aliados algonkianos, ni con su batalla con los iroqueses en los años 1600. También hay una imagen de una nueva moneda de dólar estadounidense con una representación de Sacagawea, la mujer lemhi shoshone que acompañó la expedición de Lewis y Clark de 1804-1806 en el otro lado del continente. No hay razon para incluir esta imagen que no tiene relación con aspecto alguno de la historia del Lago Champlain.
La placa también presenta un nuevo mapa del lago en sí, que oscurece, desafortunadamente, cualquier noción del lago como parte de los territorios ancestrales e indígenas. No hay indicadores que muestren las ubicaciones pasadas o presentes de ninguna de las comunidades indígenas – en Missisquoi, Kahnawake, Kanesatake y Odanak – que están históricamente conectadas con esta región y este lago. No se menciona la historia Mohawk o Abenaki, a pesar de que este monumento se encuentra en el borde del lago que conecta sus territorios. No se menciona a ninguna nación indígena en la actualidad, ni a las complejas relaciones intertribales entre ellas. En esencia, la placa oscurece, en lugar de iluminar, la historia indígena.
En definitiva, monumentos como estos, a héroes coloniales y encuentros coloniales —incluso cuando pretenden celebrar la naturaleza transnacional de las primeras alianzas— se mantienen como dolorosos recordatorios de una diplomacia fallida y de la colonización. Esta estatua, incluso con su nueva placa, sigue firmemente arraigada en el pasado. Está claro que se necesita una mayor contextualización, más información y mejores interpretaciones de estas historias fundamentales.
Referncias citadas:
Barilla, Elena. 22 de julio de 2020. “‘Interpretive panel’ added to Samuel de Champlain monument in Plattsburgh”. NBC5 News. https://www.mynbc5.com/article/interpretive-panel-added-to-samuel-de-champlain-monument-in-plattsburgh/33383840.
Beaudreau, Sylvie M. 24 de julio de 2020. “In My Opinion: The Friends of the Saranac River Trail and their interpretive panel for the Champlain Monument: Thoughtful or misleading?” The Press Republican. https://www.pressrepublican.com/opinion/in-my-opinion-the-friends-of-the-saranac-river-trail-and-their-interpretive-panel-for/article_d72c2b5c-5d6e-5341-94ac-611af7f20f49.html.
Beaudreau, Sylvie M. “Commemorating a Transnational Hero: The 1909 Celebration of the Tercentenary of the Discovery of Lake Champlain”. Vermont History 77, núm. 2 (verano/otoño de 2009): 99–118. https://vermonthistory.org/journal/77/VHS770202_99-118.pdf.
Bradley, Pat. 22 de julio de 2020. “Champlain Statue Remains With Education Panel Installed To Explain Historical Errors”. WAMC Northeast Public Radio. https://www.wamc.org/north-country-news/2020-07-22/champlain-statue-remains-with-education-panel-installed-to-explain-historical-errors.
Bourne, Edward Gaylord, coord. 1922. The Voyages and Explorations of Samuel de Champlain 1604–1616 Narrated by Himself. Traducido del francés original por Annie Nettleton Bourne. New York, NY: Allerton Books, . https://libsysdigi.library.uiuc.edu/oca/Books2008-05/voyagesexplorati/voyagesexplorati01cham/voyagesexplorati01cham.pdf.
Hill, Henry Wayland, coord. 1911. The Champlain Tercentenary Report. Report of the New York Lake Champlain Tercentenary Commission. Albany, NY: J.B. Lyon Company.
Lake Champlain Tercentenary Commission of Vermont. The Tercentenary of the Discovery of Lake Champlain and Vermont: A Report to the General Assembly of the State of Vermont. Montpelier, VT: Capital City Press, 1910.
Parkman, Francis. 1912. Historic Handbook of the Northern Tour. Lakes George and Champlain; Niagara; Montreal; Quebec. Boston, MA: Little, Brown, and Company. https://archive.org/details/cu31924014024305/page/n9/mode/2up
Véase, por ejemplo, Henry Wayland Hill, coord., The Champlain Tercentenary Report (Albany, NY: J.B. Lyon Company, 1911). ↩︎
Samuel de Champlain, en Edward Gaylord Bourne, coord., The Voyages and Explorations of Samuel de Champlain 1604-1616, traducción del francés por Annie Nettleton Bourne (New York, NY: Allerton Books, 1922), Vol. 1, 209-211. ↩︎
Samuel de Champlain, en Bourne, coord., The Voyages and Explorations of Samuel de Champlain 1604-1616, Vol. 1, 212-213. ↩︎
Véase Elena Barilla, “Interpretive panel’ added to Samuel de Champlain monument in Plattsburgh,” NBC5 News, Julio 22, 2020. https://www.mynbc5.com/article/interpretive-panel-added-to-samuel-de-champlain-monument-in-plattsburgh/33383840 ↩︎
No es casualidad que la nueva placa también borra el legado de la comunidad franco-americana que construyó el monumento. Véase Sylvie M. Beaudreau, “In My Opinion: The Friends of the Saranac River Trail and their interpretive panel for the Champlain Monument: Thoughtful or misleading?” The Press Republican, Julio 24, 2020. ↩︎
Véase Pat Bradley, “Champlain Statue Remains With Education Panel Installed To Explain Historical Errors,” WAMC Northeast Public Radio, Julio 22, 2020. https://www.wamc.org/north-country-news/2020-07-22/champlain-statue-remainswith-education-panel-installed-to-explain-historical-errors ↩︎